El proceso de conocer 

Por: Wendy Samayoa Mora

Es imprenscindible para comprender de mejor manera el proceso de investigación es darle un sentido ¿ Y cuál sería ese propósito? Ni más ni menos que el de conocer.  El ser humano por naturaleza ha tratado de determinar las causas por las que sucede determinado evento. Se han creado tipológias que van desde conocer por la experiencia y el sentido común hasta el conocer aplicando un método científico que de cuenta y comrpuebe la "validez" de mis suposiciones. 

 Si yo como investigador ansioso de establecer una respuesta a cierta duda o incertidumbre, lo primero que necesito es entender que el conocimiento que yo aplico para tal fin supone estudiarlo desde dos puntos de vista: el conocimiento como problema y el conocimiento como sistema. 

El conocimiento como problema implica ir un más allá de aceptar todo lo que se nos dice porque proviene de personajes de renombre o porque simplemente me convenció a la primera. Se debe generar cognitivamente un conflicto, ese algo que siento que me "puya" y que necesariamente debo resolver. Cabe formularse determinadas preguntas para empezar a esbozar el problema, por ejemplo ¿Cómo sabemos lo que sabemos?¿ En qué nos basamos para aceptar una determinada afirmación? ¿Qué hace que un conocimiento sea válido?

  

Hay que aclarar que no estamos diciendo que se debe cuestionar absolutamente todo y asumir una posición de escepticismo extremo.Hay que comprender que  no se debe confundir una afirmación con respecto a un proceso mediante el cual se ha obtenido conocimiento. Sin embargo, es absolutamente válido tener una criticidad implícita y descubrir por nosotros mismos la inquietudes surgidas de  los campos o centros de acción de nuestro interés. 

 Por su parte, el conocimiento como proceso se debe a la práctica de un método que nos lleve de la ignorancia a la verdad. Este procedimiento no se trata solamente de un conocer instrumental sino que también trata de comprender el sentido del cosmos y de la vida. Este tipo no puede disligar la praxis del trabajo, todo debe ir en conjunto y debemos darnos cuenta que dicho proceso casi nunca se da de forma inmediata o por lo menos a corto plazo. Son estudios que abarcan un período extenso de tiempo. 

 A nuestro haber tenemos dos tipos de conocimiento que nos permiten almacenar determinada información y codificarla como aprendizaje. El primer tipo es el conocimiento cotidiano, también llamado empírico, y que no necesita extrictamente de una formación escolar o técnica. Más bien refiere a hechos que nos suceden de forma cotidiana. Las respuestas por el logrados no deben ser de un alto grado filósofico sino que remite a circunstancias superficiales. 

Una de sus principales características es que se conforma con la evidencia inmediata. Pongo un ejemplo, cuando yo era una niña de 6 años mi mamá me decía que no tocara los discos de la cocina porque podía quemarme, como yo no estaba convencida de tal hecho, un día que mi mamá no me observaba los toqué. Como una reacción inmediata quité mis pequeñas manitas y empecé a llorar. Mi madre salió inmediatamente a ver que era lo que pasaba. Después de curar mis heridas y acurrucarme en un fuerte abrazo, me castigo toda la tarde de ese día. En ese preciso instante aunque desconocía a ciencia cierta el término en definitiva aprendí que era conocimiento empírico. 

Por otro lado, segundo tipo de conocimiento se refiere al científico, este resuelve lo que no podemos saber con el conocimeinto empírico. Supera la inmediatez del conocimiento popular ¿Por qué? Porque implica una reflexión sistemática que abarca razonamientos lógicos y una búsqueda científica basada en un problema. De ahí que cuando se hace presente el meditar e investigar poniendo a prueba un método se hable de conocimiento científico.

Ahora bien, es necesario diferenciar dos términos claves para ejecutar de la manera más eficaz posible el proceso de investigación. Si creemos que indagar e investigar es lo mismo, lamento decirle que no, existen diferencias no poco importantes entre ambos términos. Por una parte, la indagación expresa un búsqueda de determinado hecho, pero no basado en un método, por otro lado, la investigación hace uso de un análisis riguroso y comprueba en numerosas veces los expermientos para solventar en la medida de lo posible los márgenes de error. No obstante, cabe apuntar que no porque una investigación siga un proceso o método científico quiere decir que  produce algo nuevo. Al contrario muchas investigaciones van dirigidas a clasificar y a corroborar lo que ya ha sido comprobado.

Por último cabe diferenciar tres conceptos claves para los que nos interesa investigar el área educativa: investigación educativa, investigación sobre educación y la investigación en educación. 

En primer lugar, diremos que a la investigación educativa le preocupa estudiar el currículo, métodos de enseñanza y factores inherentes al acto comunicativo. Además presta atención a temas como:

1. Tiempo de aprendizaje 
2. Medios y materias educativas
3. Organización y clima de clase. 
4. Procesos de interacción y comunicación

Su foco de interés se da en lo pedagógico y la definición de su espacio intelectual en la búsqueda del mejoramiento de la educación.

Por su lado, la investigación sobre educación remite a estudios científicos, explicativos o comprensivos de fenómenos relacionados a la educación y que son abarcados por otras disciplinas como:

1. Filosofía
2. Antropología
3. Administración
4. Economía
5. Sociología
6. Psicología 

Este tipo de investigación dirige su mirada a lo particular y no a lo pedagógico. Las diferentes disciplinas y ciencias aportan teorías e instrumentos que apoyan el análisis de problemas en la educación y ofrecen marcos conceptuales para el estudio realizado.

Finalmente, la investigación en educación se refiere a todo el estudio relacionado con educación, es decir, abarca tanto la investigación educativa como la investigación sobre la educación.

 En conclusión la labor investigativa no se reduce a plantear preguntas y resolverlas de forma inmediata y sencilla. Investigar implica un proceso reflexivo y crítico que va más allá y que nos permite crear una red de aprendizajes y logros.